La bendición de Dios
Pasaje: Salmo 67
Recursos: Guía de estudio familiar
Cómo usar esta guía: Reúnan a su familia para el estudio familiar. Sean conscientes de las edades de sus hijos y determinen cómo explicarán, ilustrarán y aplicarán el pasaje. Sigan cada encabezado en el estudio. Apliquen el pasaje a sus propias vidas, hablen los unos con los otros, hagan preguntas. Y, lo más importante, ¡disfruten!
Introducción
Dios nos ha bendecido con el fin de bendecir a otros y para que Su nombre sea glorificado. Debemos tener la confianza y certeza que Él nos bendecirá.
¿Qué aprenderemos hoy?
Expliquémoslo
Anhelando la bendición de Dios (vv. 1)
El salmista pide la misericordia y bendición de Dios sobre el pueblo de Israel. La palabra bendición implicaba más allá de lo material, implicaba una plenitud espiritual. En otras palabras, la bendición no es circunstancial, sino posicional. La verdadera bendición empieza cuando entendemos quienes somos en Dios y cuál es nuestra posición en Él por medio de la obra de Jesucristo. Estamos bendecidos por quienes somos en Él y no por lo que poseemos.
Estás bendecido con una plenitud espiritual.
Buscando la gloria de Dios (vv. 2–5)
El salmista comienza pidiéndole a Dios una bendición para que se dé a conocer el camino de Dios, ya que Dios bendice a Su pueblo para que el mundo reconozca Su poder. También ora para que todas las personas alaben a Dios quien juzga a toda la tierra. Por lo tanto, nuestro más grande motivo en recibir la bendición de Dios debe ser para que Dios sea glorificado y para que seamos de bendición a otros.
Dios te bendice para bendecir a otros.
Confianza en la bendición de Dios (vv. 5–7)
El salmista dice con certeza que Dios nos bendecirá y estará con nosotros. Dios nos bendice cuando entendamos que Su corazón es que seamos de bendición para otros, por eso debemos hacerlo con la motivación correcta y esto resulta en confianza y seguridad.
Debes confiar que Dios te bendecirá.
Reflexionemos
¿Por qué debemos anhelar la bendición de Dios? El salmista dice para que Dios sea glorificado en nuestras vidas y para los que no le conocen a Él, glorifiquen Su nombre. Dios también te a bendecido para que bendigas a otros.
¿Cómo ha cambiado tu perspectiva después de saber el significado de la bendición?
Apliquémoslo
¿Has utilizado lo que Dios ya te ha dado para Su gloria y para bendecir a otros?
Para niños
Tus padres te han enseñado sobre la importancia de compartir. ¿Sabias que Dios te bendice para que tú ayudes a otros? Hay familias que no tienen para darle juguetes a sus niños. Si tienes uno extra lo puedes compartir para traer felicidad a otro niño.
Para jóvenes
Durante este tiempo de tu vida no es común ver a otros jóvenes servir a Dios. ¿Sabes que tu testimonio piadoso y las bendiciones que Dios te ha dado hacen a otros glorificar a Dios?
Compartamos
“Lo que aprendí de este pasaje que quiero poder compartir con los demás es...” (cada uno comparta lo que aprendió con su familia).
