No dejes de creer (Marcos 5:35–43)


No dejes de creer

Pasaje: Marcos 5:35–43

Recursos: Guía de estudio familiar

Cómo usar esta guía: Reúnan a su familia para el estudio familiar. Sean conscientes de las edades de sus hijos y determinen cómo explicarán, ilustrarán y aplicarán el pasaje. Sigan cada encabezado en el estudio. Apliquen el pasaje a sus propias vidas, hablen los unos con los otros, hagan preguntas. Y, lo más importante, ¡disfruten!

Introducción

Debemos tener confianza y creer en Jesús. Él aún sigue operando milagros pero la incredulidad se opone como obstáculo para ver el poder de Dios obrar. La verdad es lo que él ha hablado se cumplirá.

¿Qué aprenderemos hoy?

Expliquémoslo

Debemos creerle a Jesús sin temor (vv. 35–36)

Después de sanar a una mujer con un problema de flujo de sangre (vv. 21–34), Jesús se dispone a hacer una visita a la casa de un principal de la sinagoga, llamado Jairo, para sanar a su hija. Antes de ir, Jairo había escuchado que su hija había muerto pero Jesús le había dicho que creyera en Él y su poder. La historia de la hija de Jairo se centra en la relación entre poder y fe. La creencia da el acceso al poder vivificante de Jesús; la incredulidad lo bloquea. Dios nos habla por medio de Su Palabra y debemos confiar en ella sin temor.

Debemos tener confianza en las promesas de Dios.

La incredulidad de la gente (vv. 37–40)

Al llegar Jesús vio a mucha gente llorando por la muerte de la niña. En esos tiempos existía la costumbre de contratar a personas para el luto, pero un hombre tan influyente tendría muchos amigos que vendrían a compartir su dolor. Pero la risa desdeñosa (v. 40) con la que saludaron las palabras de Jesús parece mostrar que había poco dolor real allí, en todo el ruido. Jesús les dijo que la muchacha no estaba muerta, pero la incredulidad de ellos demostrada por la burla era de perturbación. Tuvo que sacarlos afuera. Debemos guardarnos de la incredulidad porque es obstáculo para que el poder de Dios fluya.

La incredulidad es un obstáculo para que él poder de Dios se mueva.

Jesús habla vida (vv. 41–43)

En su lengua natal de Arameo, Jesús hablo vida sobre la muchacha. Su poder fluyo y la muchacha regreso a la vida. Cuando Dios habla se cumple la palabra que es enviada. Por eso sabemos que las promesas que Él nos dejó son verdaderas y se cumplirán, cada una de ellas. (Mateo 5:18)

Lo que Dios habla se cumple.

Reflexionemos

  • ¿Por qué crees que algunas personas luchan por creer en las promesas de Dios? ¿Cómo te hace sentir que puedes confiar en la palabra de Dios?

  • ¿Has visto las promesas de Dios ocurrir en tu vida? ¿Cómo te sentiste? Ver las promesas de Dios activarse en nuestras vidas fortalecen nuestra fe.

Apliquémoslo

  • ¿Alguna vez has luchado con incredulidad? ¿Qué te ayudó a superarlo? 

  • ¿Tienes la paz en lo que Dios ha hablado sobre tu vida se cumplirá?

Para niños 

Siempre debes saber que puedes confiar en Dios. Él nunca te fallará. Él siempre será tu amigo durante toda tu vida.

Para jóvenes

En un mundo que cambia constantemente, es difícil depositar tu confianza completa en alguien o algo que no sea Dios. Él nunca cambia ni su palabra. Puedes confiar en Él. 

Compartamos

“Lo que aprendí de este pasaje que quiero poder compartir con los demás es...” (cada uno comparta lo que aprendió con su familia).