El centro de nuestra adoración (Juan 4:20–24)


El centro de nuestra adoración

Pasaje: Juan 4:20–24

Recursos: Guía de estudio familiar

Cómo usar esta guía: Reúnan a su familia para el estudio familiar. Sean conscientes de las edades de sus hijos y determinen cómo explicarán, ilustrarán y aplicarán el pasaje. Sigan cada encabezado en el estudio. Apliquen el pasaje a sus propias vidas, hablen los unos con los otros, hagan preguntas. Y, lo más importante, ¡disfruten!

Introducción

Jesús confronta a la mujer samaritana y le da la enseñanza que el momento había llegado que las personas adorasen a Dios de corazón y sinceridad, removiendo cualquier obstáculo que tome el lugar y enfoque de nuestra adoracion hacia Dios.

¿Qué aprenderemos hoy?

Expliquémoslo

El centro de nuestra adoración es Cristo (vv. 20–22)

Después de Jesús tener un encuentro con una mujer samaritana y confrontar su estilo de vida, la mujer se mueve rápidamente para cambiar el tema de su estilo de vida inmoral a la controversia religiosa en curso entre judíos y samaritanos sobre el espacio sagrado. Ella se refería al monte Gerizim, el monte sagrado de la comunidad samaritana. La montaña era visible desde el pozo donde Jesús y la mujer estaban hablando. Jesús no retoma el debate sobre los lugares santos legítimos. Más bien, señala un tiempo futuro de salvación cuando la adoración no se limitará a ningún sitio sagrado local, ni al monte Gerizim ni a Jerusalén. Cómo se adora es más importante que dónde se adora. La mujer samaritana limitaba su adoración al lugar de tradición que se le había enseñado, pero Cristo es el Mesías prometido que merece toda la adoración, ya que no tiene necesidad de un lugar para ser adorado. Fuimos creados para adorarle.

Cristo debe ser el centro de tu adoración.

Los verdaderos adoradores (vv. 23–24)

Jesús le dice a la mujer samaritana que los verdaderos adoradores adoran al Padre en espíritu y en verdad. Es decir, la adoración auténtica implica un cambio interior de corazón, no solo una observancia exterior. Los verdaderos seguidores de Dios adoran con total sinceridad. Antes de llegar a Dios, él sabe la actitud y la sinceridad con que adoramos. Él desea ser la prioridad en nuestras vidas.

Adora a Dios con sinceridad.

Reflexionemos

  • ¿Dios es la prioridad en nuestras vidas? ¿Con qué actitud adoramos a Dios? Él anhela que le adoremos con sinceridad y de todo corazón. 

Apliquémoslo

  • ¿Cuándo adoras a Dios, lo haces enfocado en él o distraído? Nuestra adoración requiere enfocarse en Él.

  • Esta semana, toma el reto de estudiar el concepto de adoración.  ¿Qué enseña la biblia sobre la adoración?

Para niños 

Adora a Dios porque él te ama.

Para jóvenes

No podemos impresionar a Dios. Cuando vengas a él para adorarlo, puedes hacerlo con sinceridad.

Compartamos

“Lo que aprendí de este pasaje que quiero poder compartir con los demás es...” (cada uno comparta lo que aprendió con su familia).