Vence con adoración (2 Crónicas 20:14–19)

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Vence con adoración

Pasaje: 2 Crónicas 20:14–19

Recursos: Guía de estudio familiar

Cómo usar esta guía: Reúnan a su familia para el estudio familiar. Sean conscientes de las edades de sus hijos y determinen cómo explicarán, ilustrarán y aplicarán el pasaje. Sigan cada encabezado en el estudio. Apliquen el pasaje a sus propias vidas, hablen los unos con los otros, hagan preguntas. Y, lo más importante, ¡disfruten!

Introducción

Judá y el rey Josafat iban a enfrentar una guerra que solos iba a ser difícil. Dios levanta a un Jahaziel, un adorador, para compartir que Dios iba a pelear la guerra por ellos. Dios pelea por nosotros, pero mientras lo hace debemos esperar y adorar. Vencemos con nuestra adoración.

¿Qué aprenderemos hoy?

Expliquémoslo

Dios pelea nuestras batallas (v. 14–16)   

El Espíritu de Dios se había derramado sobre Jahaziel, un descendiente de la casa de Asaf, el cual eran una de las familias a cargo de la música del templo. Él había profetizado sobre Judá que la guerra que estaba enfrente era de Dios y ellos deberían reposar en esa confianza. El rey había escuchado esa palabra y confió en las palabras de Jahaziel, un adorador de Dios. En las situaciones dificultosas que nos presentemos, cuando pensemos que no tenemos ninguna otra arma para usar, tenemos nuestra alabanza. Podemos reposar que Dios pelea nuestras batallas mientras le adoramos.

Dios pelea por ti.

Espera y adora (v. 17–19)

Así como Moisés animó al pueblo a "mantenerse firmes y ver la salvación de Jehová" cuando salieron de Egipto (Éxodo 14: 13–14), Jahaziel los anima a mantenerse firmes y esperar a que Dios pelee por ellos. Ante este decreto el lamento del rey de Judá, Josafat se convierte en adoración mientras él y todo Judá alaban a Dios por Su promesa de cumplirlos. Dios es fiel a lo que ha prometido. Hay circunstancias que ocurren fuera de nuestro control y debemos reposar en las promesas de Dios. La respuesta de Israel fue esperar, postrarse, y adorar a Dios y de la misma manera debemos hacer lo mismo.

Adora mientras esperas en las promesas de Dios cumplirse.

Reflexionemos

• ¿Alguna vez has pasado por circunstancias difíciles que se salieron fuera de tu control? ¿Cuál fue tu respuesta ante esta situación? La palabra nos anima a esperar en las promesas de Dios. Hay victorias que él ha prometido que recibiremos.

Apliquémoslo

• Toma un tiempo de reflexión, ¿este año pasado que ha sido alguna victoria que Dios ha hecho por ti y de que estás agradecido? Hay muchas cosas por las que debemos estar agradecidos con Dios por las victorias que él nos ha dado.

Para niños 

Es fácil olvidar por qué adoramos a Dios. Lo adoramos por la gratitud que tenemos en nosotros por lo bueno que ha sido con nosotros.

Para jóvenes

Algunas peleas no se pueden hacer solo. Dios lucha por nosotros, pero mientras esperamos la victoria debemos adorarlo.

Compartamos

“Lo que aprendí de este pasaje que quiero poder compartir con los demás es...” (cada uno comparta lo que aprendió con su familia).