Idea central
Dios nunca se olvida de los que temen Su nombre y serán recompensados.
Contexto bíblico
Malaquias habla la realidad de los que permanecieron fieles a Dios y la realidad de la distinción entre justos e impíos.Expliquémoslo
Expliquémoslo
1. Dios no se olvida de los justos (v. 16)
Malaquías se dirigió anteriormente (v. 14–15) a la gente que se quejaba de que la obediencia a la ley de Dios no traía recompensas y que sólo prosperaban los orgullosos y los malvados. No encontraban ningún valor en servir a Dios si no había distinción entre ellos y los malvados. Malaquías anima a los fieles haciéndoles saber que Dios les presta atención y les escucha.
Nos anima y desafía que genuinamente Dios no se ha olvidado de sus fieles seguidores, aquellos que temen su nombre y han entendido que seguir a Dios es más que hacer rituales y tener buena moral. Se trata de tener intimidad con Dios. La intimidad produce un respeto reverente por Dios y por quién es Él. Podemos desarrollar nuestra intimidad con Dios acercándonos a Él en oración y en la lectura de Su palabra.
Que aprendemos: Temer a Dios es reverenciar Su nombre
En tu caminar cristiano, no te concentres sólo en el conocimiento. A Dios también le importa tu corazón. Ámalo plenamente con todo lo que eres
Preguntas para discutir
¿Por qué es importante no comparar tu relación con Dios con la de los demás?
¿De qué otras formas podemos desarrollar la intimidad con Dios?
2. Sé fiel a Dios (vv. 17–18)
Aquellos que temen a Dios son Su posesión atesorada y serán premiados cuando todo esté listo y hecho. De hecho parece que aquellos que no temen verdaderamente a Dios tienen todo a su favor, pero un día todos seremos responsables ante El y seremos recompensados de acuerdo a nuestras acciones (Romanos 14:12).
Nunca debemos dejarnos impresionar por la prosperidad de los malvados. A veces es tentador compararnos y cuestionar la validez de seguir a Dios cuando las cosas no van bien, pero debemos permanecer fieles. La verdadera fidelidad se manifiesta a través de las acciones que realizamos cuando nos sobrevienen las pruebas.
Que aprendemos: Servir a Dios vale la pena
La prosperidad no siempre es una medida de lo bueno que es tu relación con Dios.
A veces las cosas suceden fuera de nuestro control, pero incluso en medio de las dificultades, Él es bueno y es digno de confianza
Preguntas para discutir
¿Qué significa para ti la fidelidad?
Llamado a la acción
Esfuérzate cada día por acercarte más a Dios. Nunca dejes de lado tu relación con Dios. Conocerle y seguirle debe ser una prioridad en nuestras vidas.