Idea central
Confia en la protección y planes de Dios para tu vida.
Contexto bíblico
Éxodo 2 narra la historia de Moisés, desde su nacimiento hasta su adopción por la hija del Faraón, destacando la fe de su madre y el plan soberano de Dios.
Expliquémoslo
1. Confía en la protección de Dios (vv. 1–4)
Después de la muerte de José, el pueblo de Israel creció y se fortaleció en Egipto, lo que causó una gran preocupación al nuevo faraón que desconocía lo que José había hecho por Egipto. Jocabed, la madre de Moisés (Éxodo 6:20), sabía que tenía un hijo especial. Entendiendo que ya no podía ocultarlo contra el decreto del faraón, lo colocó en una cesta y lo dejó flotar en el río, con la esperanza de que fuera salvado.
¡Imagina estar en esa situación! Tener que soltar a tu hijo con la esperanza de su supervivencia. Jocabed provenía del linaje de Leví y sin duda conocía y confiaba en Dios. Creía que Moisés sería alguien especial y hizo todo lo posible para que sobreviviera. Confiaba en la protección de Dios. Sabía que más que ella, Dios amaba a Moisés. Aplicando esto a nuestras vidas cristianas, enfrentaremos desafíos que pondrán a prueba nuestra fe (Juan 16:33), incluso ataques espirituales para desanimarnos. En esos momentos, debemos confiar en que Dios nos protegerá (Isaías 54:17; Proverbios 18:10). Deja que Él pelee tus batallas. Ciertamente, Dios protegió a Moisés de la muerte cuando la hija del faraón lo encontró.
Dios pelea tus batallas
Que aprendemos: Dios te protege contra los ataques del enemigo
Preguntas para discutir
¿Cuáles son algunas situaciones en tu vida en las que has tenido que confiar en la protección de Dios? ¿Cómo ha fortalecido tu fe enfrentar esos desafíos?
¿Qué significado tiene para ti el hecho de que Dios protegió a Moisés incluso en medio de circunstancias aparentemente desesperadas? ¿Cómo te motiva esto a confiar aún más en la providencia de Dios en tu propia vida?
2. Confía en el plan de Dios (vv. 5–10)
Después de que Jocabed colocó a Moisés en una canasta y lo dejó a la deriva en el río, la hija del Faraón estaba allí bañándose. Ella notó la canasta y vio a un bebé llorando. Tuvo compasión y le dijo a su sirvienta que lo recogiera. Eventualmente, la hermana de Moisés se acercó a la hija del Faraón y le dijo que conocía a alguien que podía cuidarlo. La recomendación fue su madre, Jocabed. Terminó criando a Moisés e incluso le pagaron por hacerlo mientras tenía la protección de la hija del Faraón. No se trataba tanto de la hija del Faraón, sino de quién estaba detrás de todo. Era Dios quien estaba operando detrás de escena. Dios tenía un plan que eventualmente llevaría a la historia más grande de Moisés siendo el liberador de los israelitas de la opresión egipcia.
Ahora imagina si Jocabed no hubiera confiado en Dios y hubiera guardado a Moisés. Más que probablemente, habría sido encontrado y asesinado debido al decreto del Faraón. Sabes, para cada uno de nosotros, Dios tiene un plan (Jeremías 29:11) y a veces nos desviamos de eso. Pensamos que nuestro camino es el mejor, pero en realidad, seguir el plan de Dios es lo mejor (Proverbios 3:5-6). Dios nunca es sorprendido. Siempre tiene un plan. No importa cuán desfavorables parezcan las circunstancias. Él está en control. Confía en Su plan.
Dios tiene los mejores planes para tu vida. Confia en ellos
Los planes de Dios son perfectos
Que aprendemos: Dios siempre tiene un plan
Preguntas para discutir
¿Cómo podemos discernir el plan de Dios en nuestras vidas y cómo podemos estar seguros de seguirlo, especialmente cuando enfrentamos decisiones difíciles o momentos de incertidumbre?
¿Qué papel juega la fe en nuestra capacidad para confiar en el plan de Dios? ¿Cómo podemos fortalecer nuestra fe para confiar más plenamente en Su plan para nuestras vidas?
¿Cómo crees que la historia de Moisés y Jocabed ilustra la importancia de confiar en el plan de Dios incluso cuando las circunstancias parecen difíciles o desfavorables?
Llamado a la acción
Encuentra refugio en Dios si actualmente te enfrentas a pruebas y tribulaciones en tu vida. Te espera con los brazos abiertos, te sostendrá y te guiará hacia verdes praderas.
